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CHE GUEVARA

CHE GUEVARA

 

Aniversario 40 de la caída en combate del Che y sus compañeros en Bolivia

Bárbara Vasallo Vasallo

 

"Le cortaron las manos y aún golpea con ellas”, escribió hace casi 40 años el gran poeta chileno Pablo Neruda, cuando el mundo conoció del asesinato del Che Guevara, en la Higuera, el 9 de octubre de 1967.

Nicolás Pellicari, perito y dactiloscópico de la Policía Federal de Argentina fue uno de los especialistas que tuvo a su cargo identificar al guerrillero universal, a partir de sus manos, cuando René Barrientos, el dictador presidente de Bolivia en componendas con su par estadounidense Lyndon B. Johnson, ordenó desaparecer el cuerpo del Che y pregonar que lo habían incinerado.

En un testimonio ofrecido por Pellicari, 38 años después del asesinato del Comandante Guevara, en un importante periódico argentino, el especialista narra cómo lo mandaron a buscar, en secreto, para que identificara aquellas manos sin cuerpo…

El perito narró cómo supo que al cuerpo inerte del Che, aún con los ojos abiertos, el mayor del ejército boliviano Roberto Quintanilla, en la propia mañana del fatídico 9 de octubre, le tomó las huellas dactilares y realizó dos mascarillas donde quedó estampado el rostro del hombre sin vida.

Que los médicos Moisés Baptista y José Martínez, del Hospital Señor de Malta de Vallegrande, certificaron la muerte del Che por nueve balazos e hicieron un protocolo de autopsia, pero nunca extendieron una partida de defunción.

El 11 de octubre, en el hospital de Vallegrande, Barrientos mandó a cortar las manos y enterrar el cuerpo, pero la orden general sería decir al mundo que lo incineraron. Aún le temían…

Luego de casi 40 años del asesinato del Che Guevara, los testimonios de estas personas que estuvieron cerca de los acontecimientos demuestran otra vez, la impotencia de sus verdugos y el temor a la repercusión pública. Lo que, por supuesto no pudieron evitar.

El Che Guevara es aliento para la lucha de los pueblos, y sigue tan vivo, que todavía le temen…

Como escribió Neruda: “Le cortaron las manos y aún golpea con ellas…”


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