Cuba

ELIAN CUMPLE 15 AÑOS EN CUBA

Asistió junto a su familia a una exposición en el museo de Cárdenas
Bárbara Vasallo
foto: Marisol Ruiz Soto

(Elián con Juan Miguel González, su papá en el museo A la Batalla de Ideas, en Cárdenas, a unos 130 kilómetros al este de La Habana)


Elián González, el niño que dio inicio a la Batalla de Ideas en Cuba, hace hoy nueve años, asistió a la inauguración de una exposición, en esta ciudad, sobre actos terroristas cometidos contra la Isla.
El museo A la Batalla de Ideas, abrió la muestra, especial, contentiva de documentos y fotografías que prueban acciones terroristas perpetradas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos contra el territorio y pueblo matancero en este casi medio siglo de Revolución.
Elián, quien cumple este sábado 15 años de edad, acudió junto a su padre y hermanos, compartió con familiares de Los Cinco Cubanos Antiterroristas presos en cárceles de Estados Unidos y recorrió la sala del museo que expone secuencias de la lucha por su regreso a la Patria.
A la inauguración de la exposición especia,l acudió Yadira García Vera, miembro del Buró Político, Pedro Betancourt, primer secretario del Partido en Matanzas y dirigentes de la Unión de Jóvenes Comunistas y el gobierno en la provincia.
Este seis de diciembre se cumplen nueve años de que el Comandante en Jefe Fidel Castro visitara por primera vez la escuela Marcelo Salado, de Cárdenas, donde estaba vacío el pupitre del pionero, entonces secuestrado por la mafia de Miami, en la Florida, víctima de la Ley de Ajuste Cubano.
“Vamos a estremecer al mundo con nuestra verdad y será una batalla donde no quedará ni trizas del prestigio del gobierno de ese país” (EEUU) aseguró aquel día Fidel ante numerosos periodistas cubanos y extranjeros reunidos en la pequeña aula, hoy convertida en museo.
Luego de siete meses de intensa lucha, en la que intervino más del 80 por ciento del pueblo norteamericano, Elián regresó a Cuba, actualmente cursa el décimo grado, practica deportes y vive feliz junto a sus amigos y familiares.

EN CUBA PRIMER GRUPO DE ARTISTAS DE MISION CULTURAL EN VENEZUELA

CORAZONES ARDIENTES EN LA MADRUGADA DEL DOMINGO
Barbara Vasallo Vasallo
foto: Marisol Ruiz Soto

(En la foto, Abel Prieto Jiménez, Ministro de Cultura de Cuba, da la bienvenida a los artistas que regresan de la nación suramericana)

Más de una lágrima se escapó en la madrugada de este domingo en el aeropuerto internacional José Martí, de la capital cubana, cuando un coro de más de 140 voces, perfectamente afinado, cantaba el himno de Bayamo, al bajar las escalerillas del avión que los trajo de vuelta a la Patria.
El primer grupo de artistas cubanos que impulsan, junto a venezolanos, la Misión Cultura Corazón Adentro, retornaba después de casi un año de subir y bajar cerros, recorrer comunidades, agrupar niños, niñas, jóvenes y adultos, y forjar espiritualidad en el ser humano.
En la terminal aérea recibieron el abrazo de Abel Prieto Jiménez, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y Ministro de Cultura, quien destacó la relevancia de la labor desplegada, el amor impreso en cada manifestación artística y la experiencia de convertir el desamparo en jornadas instructivas y útiles para miles de familias.
Los artistas cubanos llevaron su quehacer a los cerros caraqueños y especialmente a parroquias como Petare, Sucre, La Vega, El Valle, 23 de enero, Libertador, Recreo y Leoncio Martínez, a donde nunca antes había cantado un coro, bailado una compañía o actuado un circo.
Y entre los más experimentados, como muestra de versatilidad, los jóvenes instructores de arte, que con paciencia hurgaron en preferencias y aptitudes para convocar a cada quien y lograr que unos pintaran, otros cantaran, bailaran o manipularan un títere, o simplemente recitaran un poesía.
Inolvidable para estos creadores el ser testigos de las huellas más brutales del capitalismo, con la carga de inequidad, miseria y violencia, lastres de los que se despoja cada vez en su avance impetuoso la Revolución Bolivariana.
La Misión Cultura Corazón Adentro se multiplicará en otros estados de Venezuela en el venidero 2009, el camino se abre ancho, largo y la solidaridad de los cubanos continuará para salvar almas y brindar luz al desposeído.
Hacia todo el país partieron este domingo los artistas que llegaron en la madrugada al aeropuerto habanero. En sus comunidades contarán anécdotas, extrañarán los cerros y dormirán tranquilos por haber cumplido con un sagrado deber.
Otros partirán para continuar la obra y no apagar en América esa llama de corazones ardientes.

Orquídeas en el mayor humedal del Caribe.

Orquídeas del humedal en la Ciénaga de Zapata
Bárbara Vasallo Vasallo

Las orquídeas denotan relevancia y diversidad en este territorio matancero, por tal motivo entre el 15 y el 18 próximos, celebrarán el II encuentro sobre esas plantas en el humedal.
El día internacional de la diversidad biológica es el pretexto para la celebración en poblados como Pálpite y Cayo Ramona para desarrollar la feria de plantas ornamentales y conversar en talleres sobre la conservación de las orquídeas en los humedales cubanos.
Julio Haedo Madem, especialista del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente en la Ciénaga de Zapata, a unos 180 kilómetros al sureste de La Habana, explicó que los pobladores de esos intrincados sitios reciben con beneplácito el evento.
En algunas zonas de la Ciénaga, los grupos de la familia de las orchidaceas, en su mayoría epifitas, denotan relevancia además de su insustituible función ecológica - paisajística y de valor botánico explicó el experto.
Las orquídeas se incluyen dentro de las 15 familias que más representa el área de esta zona sur de Cuba con unas 32 especies aproximadamente, de ahí la importancia de su preservación y estudio, acotó Haedo.
Especialistas del conocido orquidiario de Soroa, en Pinar del Río, compartirán con los cenagueros estas jornadas dedicadas a la fina plantación que representa el 10 por ciento de las plantas con flores existentes en el mundo con más de 25 mil especies.

HOMBRE DE LUZ

Trabajadores eléctricos de Matanzas, apoyan en Pinar del Río
Bárbara Vasallo Vasallo

Foto: Marisol Ruiz Soto


Juan Martín Vinajeras exhibe con orgullo sus 68 años de edad, es un hombre de trabajo. Lo denotan la piel curtida, el rostro agrietado y mirada profunda.
Hallarlo no fue difícil, pero para conversar con él hubo que esperar que bajara de la altura de casi siete metros, pues se encontraba asido a un poste nuevo de electricidad y ultimaba detalles para que por allí pasara la corriente…
El entorno aún no era agradable. En el municipio de Bahía Honda, provincia de Pinar del Río, al oeste de La Habana, los huracanes Gustav, primero e Ike, después, dejaron panorama de desastre, no obstante el pueblo de ese occidental sitio, al igual que en el resto de Cuba confía y trabaja con ahínco.
Juan integra el Contingente de unos 80 trabajadores de la Empresa Eléctrica de Matanzas, que desde el día primero de septiembre prestan ayuda al territorio pinareño. Lejos de su Estrella y de sus hijos que le esperan…
Este hombre de pelo blanco, aprieta el cinturón y habla despacio, bajo, en complicidad:
“Cuando llegamos aquí encontramos postes y cables en el suelo, terreno infranqueable, y a la población sin el servicio imprescindible de la electricidad…
“No perdimos tiempo, estamos acostumbrados a trabajar, de Matanzas trajimos equipos y medios para ayudar de verdad. En estos más de 15 días ya el cuadro va cambiando, más de 350 postes nuevos están en su lugar, otros arreglados, también kilómetros de líneas reparadas…
“El trabajo no me asusta, primero pienso en esa gente a la que puedo ayudar. Encaramarme en un poste no es problema para mí, lo hago desde hace más de 40 años…
“Aquí vamos a estar el tiempo que sea necesario y si luego hay que marchar a otro lugar también iremos… donde quiera que haya un cubano, hay también solidaridad”.
La extensa Sierra de los Órganos se empina en uno de estos mediodías de septiembre. En el poblado de Las Pozas los técnicos, especialistas, linieros y obreros de la Empresa Eléctrica de Matanzas secan el sudor, y acortan kilómetros de postes, líneas y acometidas para restablecer, por fin, el servicio a la población.
En el pequeño lugar del occidente de la Isla, todo es ajetreo. Los pobladores fueron azotados por dos potentes huracanes y recuperación es la palabra que se escucha y lee por doquier.
Junto a los que clavan maderas, recogen cosechas, ponen un techo, y ambientan el lugar, anda Juan Martín Vinajeras, dando muestras solidarias, eso sí encaramado más allá del suelo, asido a un poste para traer la luz...