Honduras, represión y etiquetas

Represión, gas lacrimógeno, bombas, disparos, manifestaciones, terror mediático, silencio, fascismo, son etiquetas que se repiten y reiteran por estos días, desde el 28 de junio último, en sitios web (fundamentalmente alternativos) que dan a conocer al mundo lo que realmente sucede en Honduras, desde que el ejército, a servicio de la oligarquía, secuestró y expulsó del país a Manuel Zelaya, presidente constitucional de la nación centroamericana.
Como salidas de un filme de ficción, de esos que narran acontecimientos en América Latina, en los tiempos de guerra fría, Operación Cóndor, dictaduras militares y golpes de estado, bien patrocinados, y todos sabemos por quien, parecen las imágenes que trasmite por horas y horas el canal multinacional Tele Sur. (Aplausos para su equipo de trabajo, que a riesgo de la vida, buscan y encuentran la verdad).
Reconocidos organismos internacionales, ¡qué digo! El mundo entero, denuncia el golpe, lo rechaza, se pronuncia. Líderes mundiales, desde presidentes respetables de naciones latinoamericanas, y de otros continentes, hasta destacados intelectuales, Premios Nobel, personalidades, ya emitieron declaraciones, circularon cartas, expresaron repudio; pero Roberto Micheletti (entiéndase Goriletti) no se da por enterado.
La represión de este domingo dejó fatales consecuencias. Tiraron de verdad! Cómo se podía escuchar el audio de las cámaras que captaban el crimen. Heridos y ¡muertes! La sangre se vio claramente, muy cerca de la pista del aeropuerto. Los rostros endurecidos y enfurecidos de la gente DESARMADA, que en manifestación pacífica esperaba a Zelaya, fueron y son elocuentes.
Mientras el Goriletti y sus compinches, declaraban a la prensa, a la que respalda las acciones ilegales del gobierno de facto, “que no se había derramado una gota de sangre…”
¿Qué será entonces el líquido viscoso y de color rojo que mostraban las cámaras en las cercanías del aeropuerto? Es que la sangre de los pobres, del pueblo, de la gente humilde, no es sangre?
¿Podrá dormir tranquilo el tal Michele..gorile… como ser humano, por encima de tantas ilegalidades y con el peso de todo lo que ocurre y permite en Honduras? Tendrá conciencia?
¿Qué más tiene que hacer el pueblo hondureño? Cuántos muertos o heridos más tendrá que poner para estos personajillos abandonen lo que usurparon?
Ojala que bien pronto en los sitios del ciberespacio, que dicen la verdad, cambien las etiquetas y aparezcan palabras tales como: Manuel Zelaya, presidente de Honduras, restituido, justicia, razón, paz, democracia…